Ronaldo acabó 'tocado' anímicamente el
partido del sábado ante el Nàstic. A los veinte segundos de comenzar la
segunda parte, Capello mandó calentar al brasileño. Cuarenta minutos
después, en el 85, el cuerpo técnico avisó al delantero de que dejase de
calentar porque no iba a jugar. La cara de Ronaldo en el banquillo, al
lado de Cassano, fue un poema y la decisión de Capello afectó al
brasileño.
Según ha podido saber AS, tanto el viaje de regreso a Madrid como el
resto de la noche del sábado al domingo fueron momentos duros para Ronie.
De hecho, varios de sus compañeros le animaron en el autocar que llevó
al equipo desde Tarragona a Barcelona.
AS se puso en contacto ayer con el entorno del delantero, que fue muy
explícito: "Ronie está hundido. Es incomprensible que Capello diga en
círculos cercanos que está muy satisfecho con su trabajo y le haga esto.
Le pidió trabajo y seriedad y él ha cumplido".
El futuro.
Lo que pasó el sábado ha convencido a Ronaldo de que su futuro en el
Madrid de Capello no tiene buena pinta, a menos que el entrenador
confirme, dándole minutos, las buenas palabras que le ha dedicado ante
la cúpula del club. Mientras, el jugador pasó ayer el día en su
domicilio y por la tarde se entrenó en solitario.
No jugó por las lesiones de algunos compañeros
AS quiso reflejar también la versión del cuerpo técnico del Real Madrid.
Fuentes del mismo explicaron a este periódico que lo ocurrido con
Ronaldo no fue ninguna decisión malintencionada. La idea del Capello es
que jugara entre 20 y 25 minutos para ir cogiendo la puesta a punto. Sin
embargo, a lo largo de la segunda mitad Cannavaro, Helguera, Emerson y
Diarra se giraron en varias ocasiones al banquillo para informar de que
tenían molestias por sus choques con el delantero del Nàstic Makukula.
Capello no quiso que le pasara lo de Getafe, donde Helguera se lesionó
después de haber hecho los tres cambios. Sin embargo, en el partido de
Tarragona, Capello sólo había realizado una sustitución. |