El Real Madrid empató sin goles ante el
Fulham inglés en su primer compromiso serio de pretemporada, en el que
agradó en la primera mitad cuando el italiano Fabio Capello, a falta de
la llegada de jugadores importantes, comenzó a mostrar la nueva imagen
del conjunto madridista.
Comenzó el Real Madrid ofreciendo una cara ilusionante bajo un 4-3-3
como sistema, jugando con velocidad y presionando al rival para frenar
su salida de balón. Con el estreno de Iker Casillas en portería, una
línea defensiva adelantada y presionante, en la que Woodgate ganó la
partida a Helguera, línea de tres en el centro del campo con Pablo
García y Gravesen como perros de presa y Guti inventando por detrás de
un tridente de lujo formado por Cassano, Raúl y Baptista, que tendrán
una competencia dura cuando se incorporen Van Nistelrooy y Ronaldo.
Eran los primeros trazos de Capello que apostaba por una vertiginosa
velocidad en los primeros minutos, que fue bajando cuando los
madridistas acusaron en sus piernas el cansancio de los duros
entrenamientos en Irdning. Para entonces ya había desaprovechado
ocasiones en botas de Raúl y Baptista, que estrellaba un derechazo en el
larguero.
Lesión de Casano
La movilidad de los jugadores más adelantados y la imaginación de
Cassano asociada con Raúl, daban sus frutos hasta que el delantero
italiano se retiró lesionado en camilla dejando su hueco a un Juanfran,
con hambre de éxito, que desequilibró en banda derecha para seguir
convenciendo a Capello.
El Fulham no llegaba al área madridista pero en la única ocasión que
dispuso se topó con el palo. En el minuto 29, un centro desde la derecha
de Rosenoir era rematado a la madera por Helguson.
Los cambios fueron desluciendo el partido en una segunda parte en la que
Capello volvió a comprobar que le sobra equipaje y debe dar salida con
rapidez a jugadores como Diogo, Rubén, Borja, Portillo y decidirse entre
Pavón y Mejía, al que volvió a desmoralizar ubicándolo en el centro del
campo.
Niemi detuvo al Madrid
Jurado se sumó a Juanfran en el apartado de brillantez, pero el
guardameta Niemi impidió el triunfo del Real Madrid con intervenciones a
disparos de Guti y Portillo. |
