Segunda victoria consecutiva del Real
Madrid en apenas cuatro días, esta vez en el siempre difícil campo del
Alavés. Ronaldo fue una vez más matador y decisivo con dos goles que
rompieron un partido que Guti se encargó de rematar, en lo que son tres
nuevos puntos que sirven para enderezar el rumbo del equipo en la Liga y
coger confianza de cara al partido del miércoles en la Champions.
Con la anunciada ausencia de Robinho en el once inicial, Luxemburgo
decidió darle una oportunidad a Guti después de los espectaculares
cuarenta y cinco minutos del ‘14’ blanco del pasado jueves ante el
Ahtletic. Con Ramos y Helguera como pareja de centrales, Baptista esta
vez acompañó en el centro del campo a Pablo García, quedando para Guti
la banda izquierda, con Ronaldo y Raúl como hombres más adelantados.
El partido comenzó sin un claro dominador sobre el césped de
Mendizorroza, con tiros lejanos de ambos equipos por parte de Roberto
Carlos y De Lucas, aunque sin ningún peligro claro. Los centrocampistas
luchaban por hacerse con el control de su parcela, pero las
oportunidades sólo llegaban en jugadas aisladas, como la primera que
tuvo Bodipo tras irse en velocidad de los defensas blancos, aunque su
disparo no encontró portería.
Baptista avisa por partida doble
Por su parte, el Real Madrid intentaba desplegar su juego en el estrecho
campo de Mendizorroza. Raúl y Ronaldo no encontraban el camino y tuvo
que ser Baptista desde atrás el que creara las mejores ocasiones para
los madridistas, primero con un tiro desde fuera del área que despejó
por muy poco el guardameta local, y en la jugada posterior con un
cabezazo a la salida de un córner que rozó el larguero.
Desde entonces el partido volvió a los cauces anteriores con muchas
interrupciones y tiros lejanos como el de Bodipo (minuto 18) y de Nene
tres minutos más tarde, en lo que sería la primera intervención de
Casillas. El Madrid lo intentaba por las bandas con Roberto Carlos y
Beckham, sobre todo mediante este último, hoy más pegado que nunca a la
línea, y autor de un saque de falta que despejó Costanzo de puños, y de
otro tiro lejano al borde del descanso, también detenido por el
guardameta.
Tras la reanudación, el Madrid mostró mucha más movilidad en el campo,
con Guti y Beckham más pegados a Pablo García, y Baptista más cerca de
los delanteros. El primero en avisar fue Helguera, otra vez a la salida
de un córner. Durante todo el partido los madridistas llevaron mucho
peligro a balón parado con los certeros centros de Beckham.
Aparece Ronaldo y llegan los goles
La primera ocasión clara de la segunda parte vino de las botas de
Salgado quien desbordó por su banda para centrar y casi meter gol en un
mal despeje de los defensas. Pero faltaba por aparecer Ronaldo. En la
primera parte no estuvo muy activo y tan sólo realizó un remate desde
fuera del área. Pero en la segunda aparecería como sólo él sabe hacerlo,
es decir, marcando a la primera. Corría el minuto 67 cuando el ‘9’
madridista aprovechó un despeje de la defensa local para “enchufar” un
duro disparo desde fuera del área, ante el que nada pudo hacer Costanzo.
Con el 0-1 en el marcador, el Madrid se sintió más cómodo en el campo, y
sobre todo con más espacios. El Alavés tenía que arriesgar, lo que
aprovechó de nuevo Ronaldo para hacer una de las suyas en carrera y
disparar al palo, antes de marcar el definitivo 0-2 en jugada personal
tras pase de Beckham.
Con Robinho y Gravesen en el campo, el Madrid se dedicó a controlar el
partido y a esperar que pasaran los minutos. Ya en el tiempo de
descuento Guti, aprovechó un rechace tras un jugada de Robinho para
poner el 0-3 definitivo y sumar tres nuevos puntos en la segunda
victoria consecutiva, que sitúa al equipo en la parte alta de la
clasificación. |