Vanderlei Luxemburgo,
técnico brasileño del Real Madrid, explicó todo lo que ha sucedido desde
que por una decisión táctica sentó en el banquillo a Luis Figo y afirmó
que desde que le sacó del equipo titular "nunca" le ha vuelto a saludar.
El divorcio entre Vanderlei Luxemburgo y Luis Figo es público tras el
cruce de declaraciones de esta semana. El centrocampista portugués se
quejó esta semana en varios medios de comunicación de la falta de
comunicación con el técnico del Real Madrid, que en la rueda de prensa
previa al último partido de Liga respondió.
"Tengo que hablar porque Figo lo hizo de mi. Dijo que no tenía diálogo
conmigo, lo teníamos y no había problema pero paramos de tenerlo el día
en el que le saque del equipo y ya nunca me saludó. No me da ni los
buenos días ni las buenas noches, hablo con él profesionalmente pero
personalmente es otra cosa", manifestó.
Luxemburgo quiso dejar claro que con sus futbolistas hay dos tratos, el
profesional y el personal. Y que el último con Figo no existe y pidió
respeto para "el comandante", como bautizó el puesto que ocupa en el
Real Madrid.
"Profesionalmente mantengo un diálogo con Figo, pero personalmente no.
Nunca me ha vuelto a saludar. Yo soy el comandante y él el jugador. Me
tiene que respetar y no habrá problema, pero fuera del trabajo cuando
haga una invitación a mi casa invitaré a quien quiera y para trabajar a
todos", afirmó.
"Es normal que este enfadado por ser suplente"
Para el técnico del Real Madrid era comprensible el enfado de Figo por
quedarse en el banquillo ante el Barcelona, pero no su reacción
posterior. Pese a todo, dejó claro que profesionalmente no tiene nada
que achacar a su jugador.
"Es normal que se quedase enfadado al ser suplente porque es un jugador
que ha ganado todo y tiene muchas cualidades. Lo comprendo. Pero desde
ahí tenemos pensamientos totalmente diferentes y yo explico ahora porque
no tenemos diálogo".
En su dilatada carrera como entrenador, Luxemburgo ha vivido situaciones
parecidas en otros equipos y en la selección brasileña y si finalmente
Figo no se marcha del Real Madrid, aceptará de buen grado la presencia
del portugués en la plantilla de la próxima temporada.
"Siempre tuve problemas cuando quité a un jugador y puse a otro. Figo ha
sido profesional cuando se ha quedado en banquillo y entrando cuando le
necesitaba. La única cosa es que no tuvo diálogo conmigo porque me dejó
de saludar. Si la próxima temporada trabajamos juntos y me saluda no
habrá problema ninguno", concluyó. |