Figo podrá jugar contra el Levante. El luso
ha superado su sobrecarga en el abductor y se unió a la dinámica del
equipo. García Remón ya sabe que no podrá contar con Zidane, al que una
lumbalgia aguda le ha dejado K.O. para el domingo y para la cita ante el
Villarreal. Por su parte, Morientes sigue siendo duda para medirse al
equipo granota por un bocadillo en la pierna y Woodgate intensifica el
ritmo de trabajo.
Figo se entrenó con total normalidad con sus compańeros. El luso pudo
completar el entrenamiento sin resentirse de la sobrecarga que
presentaba en el abductor izquierdo y que el jueves le obligó a realizar
un trabajo específico al margen del grupo. El centrocampista realizó el
circuito físico diseńado por el preparador Fernando Gaspar y participó
en los partidos de siete contra siete que organizó García Remón. El
madridista estará listo para jugar contra el Levante, siempre que el
técnico lo crea oportuno.
Los que no saltaron al terreno de juego fueron Zidane y Morientes. El
francés está descartado para jugar contra el Levante y el Villarreal
debido a una lumbalgia aguda que sufrió tras el choque contra el
Leverkusen. El objetivo, según confirmaron lo médicos, es recuperarle
para la cita contra la Roma. Por su parte, el delantero es duda para
medirse al equipo que entrena Schuster, debido a un bocadillo en la
pierna. Estuvo toda la mańana recluido en el gimnasio, el sábado
intentará entrenarse con el grupo y si el test resulta positivo entrará
en la citación.
Por otra parte, Borja prosigue con su plan personalizado de
rehabilitación, mientras que Woodgate intensifica el ritmo de trabajo.
El inglés, a las órdenes del recuperador José Luis San Martín, realizó
un trabajo combinado: empezó y cerró la mańana en el gimnasio,
realizando ejercicio de potenciación con pesas y de resistencia, pero
entre medias saltó al terreno de juego donde completó series de carrera
continua, abdominales, lumbares y estiramientos. |