El
Real Madrid fue recibido a su llegada a La Coruña por cientos de
aficionados madridistas que pugnaron por acercarse a los jugadores. Sobre las
20:00 horas del viernes la expedición blanca aterrizaba en el aeropuerto de la
capital gallega. Media hora después la expedición madridista llegaba a su lugar
de concentración, el Hotel Meliá María Pita, donde se reprodujeron las muestras
de ánimo hacia los jugadores blancos, que el sábado se enfrentarán al Deportivo
en el estadio de Riazor a partir de las 22:00 horas.
La expedición madridista partió del aeropuerto de
Barajas pasadas las 19:00 horas y estaba compuesta por jugadores, cuerpo técnico
y directivos, además de periodistas y aficionados. El vuelo transcurrió con
total placidez. Algunos aprovecharon para leer y otros para dar alguna cabezada
que otra con la que espantar el sueño y recuperar fuerzas. Los gritos de los
aficionados madridistas presentes el El Alvedro nos sacaron de la calma en la
que hasta ese momento se había instalado el viaje. Los aficionados pugnaban por
hacerse una foto con sus ídolos, por un autógrafo, por tocarles o por,
simplemente, una mirada. Casillas, Beckham, Raúl, Figo y Zidane fueron de los
más solicitados. El portero no escatimó ni un solo requerimiento de firma.
La situación que se reprodujo a la llegada del equipo al hotel Meliá María Pita,
donde los aficionados se agolpaban en las puertas desde varias horas antes. Los
jugadores tomaron sus habitaciones y pasadas las nueve de la noche bajaron a
cenar. Queiroz ofreció una numerosa rueda de prensa con amplia representación de
los medios de comunicación. Tras la cena, los jugadores se retiraron a sus
habitaciones a descansar. |