Llega el Éibar al Bernabéu y
Queiroz convoca a todos sus galácticos. ¿Tiene fe en la cantera o no? Ahí está
la respuesta. La cantera debería tener entidad como para resolver una
eliminatoria ante el equipo suplente del Éibar, pero Queiroz no lo ve así. Por
supuesto que vuelve a jugar Casillas, faltaría más. Con amigdalitis o sin ella.
La cuestión de los porteros tiene su intríngulis aparte, que sólo puede ser
desvelado desde la extravagante presencia de un ex suplente del Córdoba y del
Granada, pasado de fecha, en el Madrid B. Cosas de Ramón Martínez y su
circunstancia.
Pero eso es lo de menos. Ya lo
anunciaba Gatti en el AS de ayer, en su columna titulada “Iker jugará. ¡Seguro!“.
Lo chocante es que tengan que jugar todos los demás, salvo Beckham, que sigue
con la mala herida que le infirió Acciari (menudo angelito, por cierto) sin
curar, y quizá Raúl, con lumbalgia. Y aun así, ambos están citados. La presencia
de los galácticos ante los anunciados suplentes del Éibar responde a dos razones.
Una: que Queiroz no se fía mucho ni poco de los reservas. Y otra: que si los
galácticos no juegan nadie responde de lo que hagan entre semana.
De hecho, los entrenamientos se han
convertido en algo de carácter casi misterioso. Han dejado de emitirse por Real
Madrid TV. Los hinchas confiados que pagan seis euros por el derecho a
presenciarlos han llegado alguna vez a exigir la devolución del pago, (exigencia
correctamente atendida por el club) al ver que los galácticos no estaban, o que
se entrenaban, presuntamente, en un campo lejano. Así que ante la duda de si
esos entrenamientos tienen o no la intensidad deseada, mejor que jueguen en
noches como ésta. Aunque sea matar moscas a cañonazos.
AS