Solari y Derlei, de penalti, firmaron un empate que dejó satisfechos a ambos equipos. El Real Madrid aseguró el liderato del grupo y, de esa manera, jugará la vuelta de los octavos de final en el Santiago Bernabéu. Y el Oporto, porque logró no salir derrotado del Estadio madridista por primera vez en su historia. Carlos Queiroz, que no había citado a Raúl y Helguera, dio descanso a Beckham, mientras que Figo y Ronaldo sólo jugaron cuarenta y cinco minutos. Óscar Miñambres disputó el primer partido de la temporada una vez superadas sus continuas lesiones. Jordi debutó en la Liga de Campeones. El viernes, el sorteo de octavos de final... y el domingo, el Deportivo.

Después de ganar el derbi y el clásico, el Real Madrid afrontaba, con los octavos en el bolsillo, la última prueba de la primera fase. El Oporto, con bajas importantes, amenazaba el liderato del grupo. Eso sí, los blancos debían sucumbir con estrépito para no entrar como líderes en el bombo del viernes. Para empezar, Raúl y Helguera en su casa, con Beckham en el banquillo. Queiroz, ante la visita el domingo del Deportivo, había apostado por dar descanso a alguno de sus jugadores.

El Oporto lo agradeció apoderándose del balón. El Real Madrid, en un terreno que con el paso de los minutos se estropeó por el intenso aguacero, se sentía incómodo. A pesar del incomiable trabajo de Borja y Cambiasso en la medular, el control era luso. Pese a ello, el primer gol cayó del lado local. Figo condució y vio los desmarques de Ronaldo y Solari. El cuero fue para el segundo, que batió a Baía de tiro cruzado (8´). La mitad del camino estaba andado y la responsabilidad era toda para los portugueses.

Igualada esperada
El dominio del Oporto no se traducía en ocasiones. Su juego era lento y desesperante para los aficionados que presenciaban el partido. El Madrid aguardaba el momento oportuno para dar su segundo zarpazo. Lo logró, pero el gol de Figo fue anulado por fuera de juego (28´). Deco avisó en el primer remate de los dragoes a la meta de César (29´). Del susto se pasó al empate. Salgado no acertó a despejar un balón y derribó a Deco. El penalti, transformado por Derlei, ponía las tablas en el Bernabéu. Aunque, el mayor botín, el liderato, no corría peligro.

Queiroz prosiguió con las rotaciones tras el descanso. Ronaldo y Figo se quedaban en la ducha, y Portillo y Miñambres tenían su oportunidad. El partido estaba como el terreno de juego, enfangado. Sólo Zidane, con un libre directo, desperezaba el envite, junto a una ocasión de Pavón, a punto de estrenar su casillero como goleador en Europa. Ambos equipos parecían contentos con la igualada y, hasta el final, no se esperaban mucos sobresaltos. La única alegría, el debut de Jordi López en Europa. La igualada dejaba a todos contentos. Al Madrid, porque conservaba el primer puesto; y al Oporto, porque, por primera vez, no salía derrotado del Bernbéu. El viernes se conocerá el rival de los blancos en los octavos de final.

FICHA TÉCNICA:
1 – REAL MADRID: César; Raúl Bravo, Pavón, Salgado, Roberto Carlos; Cambiasso, Borja (Jordi 89´), Figo (Miñambres, 45’), Solari; Zidane y Ronaldo (Portillo, 45’).
1 – OPORTO: Vitor Baia; Paulo Ferreira, Pedro Emanuel, Ricardo Carvalho, Ricardo Costa; Costinha, Alenitchev (Bosingwa 80´), Pedro Mendes, Deco; Jankauskas (Pereira Almeida 73´) y Derlei (Bruno Moraes 92´).
GOLES:
1-0, min.8: Jugada de Figo que deja pasar Ronaldo y Solari cruza ante Baia.
1-1, min.34: Derlei transforma un penalti cometido sobre Deco.
ÁRBITRO: Stephen Bennett (Inglaterra). Amonestó a Costinha (26´)
INCIDENCIAS: 6ª Jornada en el Grupo F de la Liga de Campeones. Estadio Santiago Bernabéu, media entrada (43.715 espectadores). Noche muy lluviosa en la capital de España. En el segundo tiempo, un espectador se encadenó a la portería de César. El incidente no pasó a mayores.

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