Unos 80 miembros de la policía y del ejército se encargan de velar por la seguridad de la selección brasileña en el ‘bunker’ en el que se ha convertido su hotel las 24 horas del día. La manzana de calles anexa al hotel está totalmente cortada por todas sus vías de acceso por el comando antiterrorista, todas las puertas de acceso están controladas por la policía e incluso en la azotea cuatro francotiradores se encargan de que las plantas quinta, sexta y séptima no sufran un problema “no deseado”.

Para acceder al hotel se debe mostrar una acreditación especial que llevan todos los clientes del complejo. En caso de olvido la policía es tajante y no deja acceder al recinto hasta la confirmación por parte de la recepción de que la persona en cuestión se aloja en ese hotel. La alarma en torno a un posible incidente con la Selección de Ronaldo (como la llaman en Colombia) ha provocado que el dispositivo de seguridad sea el mismo que cuando llegan al país jefes de Estado de otras naciones.

Los turnos de guardia son de ocho horas. A la policía y al Comando de Élite Antiterrorista les apoyan un centenar de miembros del Grupo Gaula Antiterrorista, que lo configuran miembros del Grupo Antiterrorista vestidos de civil. Todo este dispositivo seguirá a la Pentacampeona en el hotel y en los desplazamientos al estadio Metropolitano para entrenamiento y partido. Estos desplazamientos serán custodiados por cuatro motos que abren vía, una ambulancia, cuatros vehículos de la Policía y cierra la caravana el grupo antiterrorista. Además de patrullas callejeras que examinarán todos los recorridos por los que circulará el autocar de la Penta.

Hay mucha delincuencia

Dicen que Barranquilla es una de las ciudades más seguras de Colombia. Las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) no suelen realizar atentados en esta ciudad pero la delincuencia sí que es un problema. Los coches no se pueden parar en los semáforos aunque estén en rojo, los turistas no se deben alejar demasiado de sus hoteles e incluso para cambiar dinero se cierra el local de cambio para evitar atracos momentáneos.

Brasil no salió del hotel

Los jugadores de la selección brasileña sólo abandonaron sus habitaciones en el momento de subirse al autobús para ir al entrenamiento. Únicamente Dida y Roque Junior se dejaron ver por el hall del hotel, el resto permaneció en sus habitaciones. Ronaldo y Roberto Carlos sólo tuvieron contacto con la calle través de una cristalera desde la que saludaron a los aficionados que se encontraban esperándoles tras la barrera policial.